Desde
Safara siempre hemos insistido en que nuestras
carpas pueden instalarse en cualquier superficie y rincón de
España. De esta forma hemos dado cobertura a todo tipo de celebraciones en base a las necesidades de nuestros clientes. Sin embargo, no hemos querido quedarnos ahí, sino que hemos tomado la decisión de ir todavía más allá. ¿Cómo? Acabamos de abrir delegación en el país vecino.
Safara en Portugal es ya toda una realidad. Por qué crear Safara en Portugal
Portugal, junto con España, forma parte de la Península Ibérica. Esta unión territorial también se ve reflejada en la
buena relación que han mantenido siempre sus habitantes. Sin duda, ambas naciones se han influido mutuamente en cuanto a costumbres, gastronomía e incluso idioma; hasta el punto de considerarse “países hermanos”. Por otro lado,
Portugal cuenta con un patrimonio cultural y monumental enorme, lo cual genera que disponga de
hermosas localizaciones donde desarrollar eventos de cualquier índole. Ciudades con un encanto especial, palacios con grandes jardines, parajes naturales espectaculares, entre otras muchas opciones, son las posibilidades que este bello país pone al servicio de celebraciones que, sin duda, requieren de un
servicio profesional de venta o alquiler de carpas para que todo salga a la perfección. De la
unión de todos estos factores ha surgido la demanda de una sede de Safara en Portugal.
El inicio de Safara en Portugal
El primer evento de Safara en Portugal ha sido un auténtico lujo. Tuvo lugar durante el pasado mes de julio y se trató de un
montaje de carpas ideado para una boda. La ceremonia se celebró en
Paço da Glória, un hotel rural situado en la provincia de Viana Castelo. Esta localización dispone de una extensa historia. Su construcción data del siglo XVIII y corrió a manos de Francisco de Araújo e Amorim, quien ganó una gran fortuna durante sus años en Brasil. Desde entonces, el inmueble ha ido pasando por diferentes manos hasta convertirse en la
casa de huéspedes y lugar de eventos que es a día de hoy. Así, nos encargamos de montar en su exterior una estructura formada dos carpas de 15×21 metros y 9×12 metros, respectivamente. De esta unión resultó un
espacio total de 500 metros cuadrados. El resultado fue realmente espectacular, muy influido por la elegancia que otorgan las carpas y la majestuosidad del hotel. Por tanto, para todo el equipo que compone Safara es una gran alegría haberse estrenado en Portugal con un proyecto de estas características. Si estás interesado en ampliar información sobre nuestros servicios en Portugal, no esperes para
ponerte en contacto con nosotros.